Mensaje al pueblo de El Salvador.
Eduardo Beltrán
Presidente Fundador.
Hermanos y Hermanos Salvadoreño (as): En primer lugar felicitarlos porque este día. Estamos empezando a asumir un reto entre miles y miles de salvadoreños en el exterior y en la misma casa que nos vio nacer con ese sentido de solidaridad y transparencia que nos caracteriza.
Ustedes que calladamente ven los acontecimientos socio políticos. Es de felicitarlos porque estamos debatiendo éticamente en una línea del respeto para actuar como órgano de consulta y que se abran espacios de carácter incluyente.
El Movimiento Cívico Patriótico (MCP) está basado en la democrática incipiente que vive nuestro país, El SALVADOR. El vacío de definición política que impera provoca que se revuelva el río, es urgente crear espacios y buscar nuevos valores y apoyo a la juventud que no es tomada en cuenta en los escaños políticos, como si no tuvieran voz y voto; y es que acaso que no podemos desplegar toda nuestra capacidad de influencia en la disputa tan intensa que hay que librar por tratar de rescatar la nación de un estancamiento económico, político y social, con abismo tremendo y una deuda externa galopante.
Es evidente, tenemos que trabajar a través del debate y fortalecer la unidad del Movimiento Cívico Patriótico (MCP),para consolidar un campo patriótico y democrático, que debe además, debe ampliarse para avanzar a consolidarnos como una nueva mayoría dentro del País respetando todo el marco jurídico.
En las próximas elecciones es muy importante nuestro avance, pero no tendremos un rol de confrontación porque hay que estar en los zapatos de los otros para ser críticos. Así no se logra apoyo mayoritario. Y necesitamos construir esa mayoría para poder derrotar a la miopía de muchos políticos, que han hecho de su cargos carrera vitalicia, como si no hay jóvenes que piensan, para generar una nación más prospera, más representativa a sus intereses en general y sobre todo de país; pero es urgente el capital nacional y transnacional para generar más fuentes de trabajo, tanto en el área rural como en sus 14 departamentos para evitar la fuga de nuestro recurso humano que exponen su vida cuando se van indocumentados y he experimentado lo que es estar preso por buscar el sueño americano, y regresar al país, a condiciones peores porque uno vuelve sin nada.
Con ese objetivo estratégico en la mira, nosotros debemos de discutir todo lo que deseamos, todo el programa de desarrollo que debemos de buscar y alcanzar como nación, nadie lo hará por nosotros. Y en eso no hay mucha concordancia entre El Movimiento Cívico Patriótico, en eso hay bastante acuerdo al sentir de ustedes hermanos salvadoreños.
Todo lo planteado por El Movimiento Cívico Patriótico (MCP) es respetando el estado de derecho y nuestra carta magna de manera serena y pacífica, el problema es grave, como salvadoreños debemos resolver e ir despolitizando cada tema para que los acuerdos lleguen a las grandes mayorías, de esa lluvia de ideas, evitar el dolor en cada hogar de gente que sufre el flagelo de la delincuencia, falta de empleo, deseamos, a gritos transformación cualitativa y cuantitativa del régimen socio- económico y político de nuestro amado El Salvador, este será viable en la medida que todas las fuerzas cierren filas desde la trinchera patriótica. Ese es el tema, hermanos y hermanas Salvadoreñas.
Y al respecto que compartimos esencialmente la propuesta hacia el desarrollo. El Movimiento Cívico Patriótico con su slogan “Una nueva luz”… Un nuevo sol para El Salvador. Es de carácter patriótico y democrático como el principal sujeto del cambio, este movimiento no agrede a nadie, pero se apega a la voluntad popular, para las elecciones futuras como ente de consulta de índole incluyente y seguiremos el camino hacia la paz, el desarrollo y la justicia social.
Nos parece que la tarea de organizar de manera participativa y permanente al Movimiento es esencial para que se consolide, es la orientación a la que debe estar subordinada la política legislativa, ejecutiva y judicial.
Como movimiento nos duele ver como el sector productivo, estudiantil y cada uno de los salvadoreños son llenos de luto por la inseguridad que se ha apropiado de nuestra sociedad, siendo aún victimas el sector de la seguridad pública. Hay que darle mucha fuerza a esa pelea por evitar la violencia venga de adonde venga. Estancando el desarrollo social y democrático de nuestro pueblo Ese es un tema central también de política ejecutiva, legislativa, judicial y de línea general actual de avanzada.
Y para terminar, creemos que este debate debe de culminar en un encuentro de Legisladores y gobiernos locales con acuerdos resolutivos que de aquí salgan para generar una Línea política, que nos permita salir de la crisis tan profunda que vive nuestra nación, Lo idóneo es que después de las elecciones los nuevos legisladores y alcaldes se sienten para generar un plan de nación productivo. En materia de seguridad e inversión interna externa y en el QUINQUENIO 2012-2014 Estaremos listos para llegar al poder de manera coherente y Democrática como instituto Poltiico.
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